junio 06, 2007

EDUCADOS EN LA VIOLENCIA

Imposible escuchar el testimonio de Harry, un estudiante que fue victima de mofas y golpes durante su vida escolar y no sentirse identificado con tan horrenda experiencia. Es que hemos sido muchos las victimas de la violencia escolar, lo que hoy tan decorosamente y a tono con el lenguaje global denominan “Bullying”. Como una costumbre popular lo define morbosamente por estos días la televisión, que en el solo afán de reaiting, ha tocado el tema en forma reiterada. Un “juego” dicen los preadolescentes que han puesto de moda estas prácticas subiéndolas al Yoe Tube en Internet. Al igual que en el artículo anterior ( “educación y valores”) me mueve el propósito de compartir con ustedes una reflexión, que sin duda alguna puede estar marcada por experiencias personales, a las cuales no me referiré directamente, ya que no es mi intención ser autoreferente, ni menos latearlos con dichas experiencias, en las que de seguro podemos tener coincidencias generacionales. Hemos de adentrarnos entonces en las posibles causales de este fenómeno y hasta donde de la página.., para dilucidar el por qué de estas aberrantes practicas que imprudentemente se abren paso entre nuestros alumnos, y desde una mirada critica, la misma que debiéramos promover en ellos, abordar el tema de la VIOLENCIA ESCOLAR. Si bien es cierto en la actualidad se atribuye a los medios de comunicación masivos, la responsabilidad en la entrega de contenidos que están masificando el clima de violencia en las escuelas del País, sumado al mal uso de internet…No menos verídico es el hecho que dichas manifestaciones y conductas han estado presentes por décadas (siendo generosos) en los establecimientos educacionales; en los cuales en algún momento también fuimos protagonistas, ya sea en el papel de “victimario” o “victima” o indistintamente ejerciendo ambos roles en determinadas circunstancias. Y como no ? si fue la misma Institución Escuela que complaciente y cómplice a la vez imponía castigos humillantes a sus educandos, “beneficio” al que se accedía con el beneplácito incluso de los propios padres, legitimando el accionar de profesores y Directivos “ la letra entra con sangre “, era la convicción . Por transmisión oral nos enteramos de los castigos infringidos en tiempos de los abuelos, y luego de boca de nuestros propios progenitores supimos de ejemplares castigos ! de arbejas o porotos en las rodillas, ardientes chicotazos de cuero, todo esto acompañado en ocasiones, de rezos interminables… oraciones de suplica y perdón. “ La violencia escolar se institucionalizó por décadas en el sistema Educativo, hoy sólo estamos viendo el fruto de lo que se sembró por generaciones . Sin duda hay factores Psicosociales y culturales atingentes a lo local y Nacional, y por cierto factores asociados al tipo de sociedad que reproduce eficientemente el sistema educativo Global” Generaciones completas de estudiantes conocimos del imponderable coscacho en la cabeza, a mano pelada o con anillo, la refregada de patilla, el pellizcón. Acaso alguien no recuerda la varilla de mimbre, o el puntero que tan displicentemente portaban algunos de “ nuestros recordados maestros ” , eso si para disciplinarnos y enseñarnos a ser buenos niños, por supuesto. O como olvidar aquel amigable Inspector General, declarado hijo ilustre del pueblo, aquel energúmeno de enormes manos que golpeaba nuestros oídos…., ante la menor distracción en la fila de la banda escolar. Ni hablar del trato que recibieron niños y niñas mapuches en tiempos de la Colonia y posteriormente en el Chile Republicano, desde la creación de la Escuela Nacional de O´Higgins se imparte una educación sistemática y uniforme negando con ello la diversidad cultural, otra forma de violencia. Aun esta latente en la memoria de mujeres mapuches al sur de Tirua, el mal recuerdo de un profesor de Castellano…..”El Profesor nos golpeaba en la boca porque hablábamos nuestra lengua, el Chedungun; el quería que solo habláramos Español, nos decía ….De miedo a los golpes muchas de nosotros perdimos nuestra propia lengua, la que tampoco enseñamos a nuestros hijos, para que no fueran golpeados de igual manera” ( Casa de Piedra 1980) ¡ si leyeron bien! mil novecientos ochenta, claro muchos de ustedes ignoran de estos abusos, otros optaron por hacer la vista gorda. Con ello no estoy afirmando que el nivel de violencia escolar procedente desde los educadores se haya mantenido en el tiempo, pues este factor al menos, esta controlado y en retirada desde hace años, en lo que respecta a flagrantes agresiones físicas. Toda vez que hoy existen variados mecanismos, reglamentos y leyes que protegen a los estudiantes y a los niños en general; legislación que ya hubiésemos querido tener en nuestra época. Como tampoco estoy afirmando que muchos de los que recibimos pedagógicos golpes hoy lo estemos replicando en nuestros hogares o en nuestro trabajo, aunque es una realidad;¡¡ la violencia se ha instalado en nuestra sociedad como mecanismo de control, de represión, de solución de conflictos, de castigo, etc. La violencia presente en el quehacer nacional desde el poder, y de ello dan cuenta episodios y hechos históricos omitidos justamente por el sistema educativo. En nuestra historia más reciente la violencia sistemática y cotidiana aplicada durante los 17 años que duro la dictadura militar, tiene sus secuelas, la violencia física y psicológica pasó a formar parte de una cultura escolar y ciudadana. Las burlas, los sobrenombres, la agresión física que están padeciendo no pocos estudiantes en la actualidad, en distintos establecimientos escolares, incluso en colegios emblemáticos como el Instituto Nacional, no son nuevos ! están presentes en nuestra sociedad como dije antes, desde la gestación del Estado –Nación . Solo que ahora la violencia escolar ha adquirido nuevas formas, confluyen en su desarrollo factores históricos como los mencionados y un modelo de sociedad coherente con el sistema educativo y la ideología imperante. Parte de nuestra idiosincrasia criolla dirán algunos.., tratarnos así de mal ? esta en muestra naturaleza dirán otros tantos, siempre el más fuerte imponiéndose al más débil ¿ tendremos que asumirlo como parte de una identidad Nacional y/o popular ?. Siendo el sistema educativo el pilar fundamental de la sociedad y por el cual hemos transitado todos los ciudadanos, le cabe a este una gran responsabilidad en la formación de hábitos y valores, objetivos que en la sociedad de mercado han sido reemplazados por la cultura de lo desechable de lo superfluo. Si a ellos agregamos la segregación social que ha generado un sistema educativo absorbido por categorías económicas, cuyo énfasis y objetivos están puestos en la productividad y el desarrollo de la sociedad de mercado ( eficiencia-eficacia) tenemos como producto proyectos educativos orientados a reproducir relaciones sociales de desigualdad, el otro rostro de la violencia. Otra consecuencia perjudicial es sin duda la vulnerabilidad del núcleo familiar, que en algún momento fue trinchera de formación , de valores y principios; hoy expuesta al consumismo y al materialismo, donde el TENER ha desalojado al SER, a la persona, la felicidad objetivo de todo ser humano hoy es sinónimo de fama efímera, de moda, de la satisfacción compulsiva de comprar, no para satisfacer necesidades sino mas bien para tener, para acumular, para aparentar. Se dispone de más tiempo para el trabajo en pos de estos objetivos, se ha perdido la preocupación por los hijos, se ha extraviado la comunicación. Debemos poner menos atención a la TV, y preocuparnos mucho más de nuestros niños y jóvenes, darse espacios en la familia para conversar, para dialogar. Para los que tenemos la responsabilidad de educar , no fijar tanto la educación en los contenidos, en la nota; tenemos que tener la capacidad de otorgar espacios para la conversación, para la comunicación, en definitiva para la participación. Tenemos que conversar con nuestros alumnos sobre la vida, contarles de nuestras experiencias, acompañarlos en los recreos, incentivarlos al deporte, a la música, al arte, a la poesía! Interesarse en su entorno inmediato, en su contexto, en su cultura, otorgarle espacios para que la desarrollen(EIB), cuando corresponda. El Ministerio de Educación debiera considerar en la supuesta reforma a la LOCE, infraestructura para que nuestros alumnos tengan acceso a una sala de música y de arte, en los recreos por ejemplo. Un espacio (sin cerrojo) donde los instrumentos musicales estén a disposición del alumno y al desarrollo de su creatividad, una sala audiovisual, por que no? donde el alumno consensuadamente pueda acceder a contenidos de interés personal, pero también a aquellos orientados a una formación integral., en definitiva no dejar espacios ni tiempos para el ocio escolar negativo. Las alternativas son evidentes o seguimos replicando lo que se ha transmitido de generación en generación, o nos comprometemos, cada uno desde el lugar que corresponda a transformar una sociedad y un sistema cada vez mas deshumanizante. De lo contrario seguiremos viendo el reality de la violencia escolar, y con consecuencias tan nefastas como el de aquella alumna que hastiada del Bullying , acabo con lo más hermoso que tenia, su vida. Para los que nos desempeñamos profesionalmente en el mundo rural mapuche es una “satisfacción” constatar que nuestros niños aun no se contaminan con dichas practicas, tan propias del mundo occidental . De ahí nuestro interés y compromiso de seguir promoviendo y rescatando una cultura que posee mecanismos de aversión de dichas conductas, otro motivo más para valorar la cultura de nuestros alumnos dentro y fuera del aula , en los aprendizajes y en la formación integral ; tan bien desarrollada por el saber mapuche: el respeto mutuo, a la personas mayores, la reciprocidad.....En definitiva un modelo de persona, hoy amenazada por la imposición de valores foráneos. Jaime del Río Fernández Profesor de E.G.B.
Temuco, otoño 2007

1 comentarios:

wishkamelinawel dijo...

Esta Usted en la piedra el aguila en el nawelbuta